La ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, ha anunciado esta mañana que el cuarto trasplante de cara en nuestro país cuenta ya con todos los permisos necesarios para llevarse a cabo en cuanto surja un donante compatible. En la misma situación se encuentra el receptor del primer trasplante de piernas, que el Consejo Interterritorial ya autorizó.
Durante su intervención en la apertura de la jornada 'Últimas fronteras en trasplante', celebrada en la sede madrileña de la Fundación Ramón Areces, Pajín ha confirmado que la Comisión de Trasplantes del Consejo Interterritorial ha emitido el informe positivo para realizar el cuarto trasplante de cara que se realizará en España.
La operación (decimocuarta de este tipo en el mundo) se realizará en el Hospital La Fe de Valencia a cargo del equipo del doctor Pedro Cavadas. "La intervención se hará cuando surja un donante adecuado", ha dicho el cirujano en rueda de prensa.
Con el interés de mejorar la calidad de vida de la pequeña niña, llamada Olaya Moscardó, afectada por una sepsis meningocócica, sus familiares se pusieron en contacto con el doctor Pedro Cavadas, jefe de Cirugía del Hospital La Fe de Valencia.
Al conocer esta historia el Dr. Cavadas se comprometió a operar a la pequeña niña de forma completamente gratuita para la familia ya que la fundación que lleva su nombre acarreara con los gastos de dicha operación. Realizará la primera de una serie de intervenciones con las que se espera que la niña recupere el antebrazo y la mano izquierda, y los dedos de la derecha, a lo largo de los próximos años.
La pequeña Olaya Moscardó ingresó el 16 de mayo de este año en el Hospital La Fe de Valencia, con sólo 7 meses de edad, debido a una sepsis meningocócica. Después de varios meses ingresada, en septiembre pudo volver con su familia, pero cargando con graves secuelas: amputación del brazo izquierdo y de los dedos de la mano derecha, amputación de todos los dedos de los pies y de parte de la nariz y del labio.
Para ayudar a sus padres, ambos en paro, la Fundación Irene Megías llevó a cabo una campaña de recaudación de fondos bajo el lema 'Un gesto por Olaya' que ya ha conseguido más de 8.000€.
Entrega de la recaudacion a la familia de Olaya Moscardó
El Dr. Pedro Cavadas, junto a su equipo médico, ha realizado el primer trasplante en el mundo de cara, mandíbula y lengua. Esta operación se ha realizado en el Hospital Universitario La Fe de Valencia. El receptor del trasplante es un hombre de 43 años procedente de Canarias que recibió los tejidos faciales de otro varón de 35 años, fallecido en accidente de tráfico.
El paciente perdió la parte inferior del rostro, "desde las comisuras de la boca hasta la base del cuello" con explicaba el Dr. Cavadas,(labio inferior, mandíbula y lengua), como complicación de la radioterapia recibida para el tratamiento de un tumor. Tras múltiples intentos de reconstrucción, las técnicas empleadas no evolucionaron como se esperaban. "El calvario duró 11 años y su única opción era el trasplante de cara, mandíbula y lengua. Ahora, debería ser capaz de tragar, algo que no ha podido hacer durante estos 11 años y por ello llevaba una sonda de alimentación; debería recuperar la sensibilidad de la lengua incluso parte del sentido del gusto en uno de los lados; y debería recuperar la dignidad humana" también declaraba el prestigioso cirujano.
La intervención fue "especialmente complicada" porque lo que quedaba de cuello y parte inferior de la cara "estaba excesivamente distorsionado". El Dr. Cavadas ha explicado "que se trabajaba con el paciente desde hace un año y hace alrededor de tres meses se le intervino para identificar selectivamente los nervios sensibles y motores de lengua, cara y mandíbula que íbamos a necesitar en el trasplante, ya que se trata de un trasplante funcional y no sólo de apariencia".
La recuperación será un proceso muy costoso, ya que no es sólo recuperar la mimética (gestos) de la cara sino que tiene que volver a aprender a articular palabras, masticar y deglutir. La fase de rehabilitación del acto de tragar y de los movimientos de lengua se prolongará durante varios meses y la rehabilitación de los movimientos de la mandíbula empezará un mes de esto anterior. El proceso es largo pero sólo el beneficio en cuanto a recuperar el aspecto de persona que le permita tener dignidad humana ya es inmediato. Ahora "Está hinchado, pero tiene cara, ya se ha visto en el espejo y está encantado", ha apuntado el Dr. Cavadas.
Pero esta operación no ha sido todo lo espectacular que parece por su historia ya que se ha visto "manchada y salpicada" por la negligencia de algún participante en el proceso de la operación ya que 48 horas después de haber finalizado el primer trasplante de cara se ha producido la filtración de los datos personales del donante. Normalmente no se realizan comentario o menciones de una evolución postoperatoria pero el propio Dr. Cavadas ha explicado que se ha decidido a hablar pronto porque "se ha violado algo tan sagrado como la intimidad del donante". "No sé a quien hay que reñir, pero quién sea que conjugue el verbo de no lo volveré a hacer", ha dicho el cirujano valenciano, visiblemente molesto.
Sobre la familia, Cavadas ha expresado que "decir que están molestos es un eufemismo. Me consta que están preparando acciones legales". La familia del paciente está muy molesta.
Esto abre un polémico debate sobre la moralidad y la ética sobre este tipo de trasplantes tal y como ha comentado el propio Dr. Cavadas en una entrevista realizada a XLsemanal, ya que a pesar de las espectaculares operaciones que ha llevado a cabo el Dr. Pedro Cavadas, no todo ha sido elogios hacia el cirujano, puesto que hay un colectivo de personas que discuten la moralidad de dicho trasplante por invadir o transgredir la intimidad del paciente al usar algo tan personal de su cuerpo como es el rostro.
Al margen de esta "polémica" es indiscutible que el Dr. Cavadas esta realizando operación que mejoran de manera radical la calidad de vida de los pacientes y ningún otro cirujano se atrevería ha realizar.
La paciente, llamada Alba Lucía Cardona , es una mujer colombiana vecina de Castellón de 47 años que tenía las manos amputadas desde hacía 28 años a consecuencia de una explosión mientras realizaba un experimento de química. El hecho de llevar 28 años con ambas manos amputadas es lo que hace que la operación del Dr. Cavadas sea todavía mas espectacular si cave ya que como señalo el propio cirujano "cuanto más tiempo pasa desde la amputación de una mano los tejidos están en peores condiciones y más difícil es la rehabilitación y la cirugía", defendió también que la intervención "es ser brillante y llegar a tener dos manos útiles que le permitan una vida independiente, lo más parecida a la normalidad, es mucho mejor que cualquier prótesis". Aunque este no es el primer "milagro" que obra el Dr. Pedro Cavadas, como bien se puede observar en el siguiente vídeo donde se muestra una entrevista que Televisión Española le hizo hace algún tiempo.
El riesgo de rechazo de dicho trasplante es el mismo que en cualquier otro trasplante, por lo que la paciente debe llevar una medicación de por vida, aunque es más fácil de diagnosticar el rechazo en un órgano que se está viendo que en otros en los que el médico sólo se puede basar en los resultados analíticos, además, la donante era más joven que la paciente receptora, aunque de raza y tamaño similar, y características compatibles para poder realizar el trasplante bilateral, seis centímetros por encima de la articulación de la muñeca.
La paciente empezó doce días después de la operación las sesiones de rehabilitación para recuperar la movilidad en los dedos y extremidades, y según los médicos presentaba una evolución "espectacular", pues enseguida percibió los estímulos en la muñeca y en la palma de las manos. Alba Lucía Cardona, la paciente, aun deberá realizar rehabilitación durante aproximadamente unos 18 meses.
El Doctor Pedro Cavadas ha vuelto a colocar a Valencia en la vanguardia de la cirugía reconstructiva mundial al extirpar un tumor desmoide gigante a un joven valenciano de 29 años.
Con esta operación, el doctor Cavadas ha procedido a la extirpación de toda la pared torácica y abdominal derecha del paciente, incluido el diafragma, para extraer el tumor de tamaño gigante. La operación, que tuvo lugar el 15 de abril del 2008 y duró unas 12 horas, es la primera de estas características que se ha hecho en España y una de las pocas que se han contabilizado en el mundo.
Fco. Javier Alcalá, después de la operación.
Si el joven de 29 años no se hubiera sometido a la operación "habría tenido una muerte segura y miserable", explicó el Dr. Cavadas. De hecho, el tumor, que pesaba "entre 15 y 16 kilos" y no tiene riesgo de metástasis, se encontraba ya cerca del corazón. El fallecimiento se hubiera producido por el aplastamiento de los órganos vitales del enfermo. El quiste se podía apreciar a simple vista, según aclaró Cavadas.
Tenía ya la piel abierta y el tumor le salía hacia fuera. Necesitaba curas continuas, cada dos días se procedía a ello en el Hospital Universitario La Fe de Valencia. El Dr.Cavadas señaló que la intervención era muy complicada. "Más que la enfermedad, el problema se encuentra en la magnitud de la operación, ya que se le han extirpado nueve costillas, los músculos del abdomen y tórax entre la axila y la ingle hasta la columna vertebral", apuntó Cavadas. "Todo ello hubo que tirarlo, ya que en esta zona se encontraba el tumor", recalcó.
Posteriormente, tuvieron que proceder a la reconstrucción de lo que había sido extirpado. "Lo hicimos con una técnica mixta en la que se combina el uso de tejidos del propio paciente extraídos de otras partes de su cuerpo y con materiales sintéticos", resaltó el cirujano. Pedro Cavadas señaló que se había practicado la cirugía "porque es la única cura que hay". Recordó que la operación "tiene unas altas posibilidades de éxito" y el principal problema es el postoperatorio. "Pero en esta ocasión ha ido muy bien. De hecho, el paciente está en casa quince días después de la intervención", destacó.
"He vuelto a nacer. Sin la operación podría estar muerto". Así de emocionado explicaba Francisco Javier Alcalá, el paciente en cuestión, la situación en la que se encontró tras haberle sido extirpado el tumor. El paciente también afirmó "Me encuentro molesto, pero bien. Puedo caminar con dificultades, ya que todavía tengo grapas y puntos".
Ahora ya piensa en el futuro. "Me han dicho que podré hacer vida normal, aunque no sé todavía dónde podré trabajar. Primero tengo que pasar por el tribunal médico", resaltó.
